Es tiempo de calabazas, ¡es tiempo de Calabizo!
El Calabizo nace de la mano de tres mujeres emprendedoras emplazadas en Nigrán, Pontevedra, que han luchado por conseguir introducir en el mercado un producto único e innovador. Han creado un chorizo, elaborado de manera artesanal, en el que la carne deja paso a los vegetales. La calabaza es el ingrediente principal y, aunque en un principio parezca imposible, esta nueva variedad recuerda al chorizo tradicional.
La filosofía de Edurne, Keila y Sofía para impulsar esta iniciativa se basa en la intención de aportar su grano de arena para conseguir una alimentación más saludable y respetuosa con el medio ambiente.
Calabizo: el chorizo de calabaza
Su sabor y su aspecto es similar al chorizo de siempre, sin embargo, el Calabizo se produce únicamente con ingredientes vegetales. Cuando lees la composición de este nuevo producto sabes que se trata de un producto único y de calidad. Contiene un 90% de calabaza que se combina con otros ingredientes como el ajo, pimentón, cebolla, orégano, aceite y sal, lo que lo define como un embutido absolutamente natural y vegetal.
Es la elaboración de manera tradicional, a través de un curado y ahumado con madera de roble, lo que le aporta ese toque final que nos recuerda tanto al chorizo de carne.
El Calabizo tiene dos versiones, la vegetariana y la vegana, ambas tienen su variedad picante y otra tradicional y entre sus propiedades se encuentran un bajo contenido calórico junto con un alto valor nutritivo. Además se considera una fuente de fibra y rico en antioxidantes.
Convirtiendo el embutido más clásico en vegetariano
El proceso de elaboración de este producto es un proceso meticuloso, realizado de la manera más tradicional. Consiste, en primer lugar, en ablandar la calabaza para posteriormente pelarla y retirarle la pepita. Nuevamente vuelve a ser asada para poder triturarla y mezclarla con el adobo. Más tarde se embute de la misma manera que se embutiría el chorizo como todos lo conocemos para finalizar con el ahumadero y secado.
La curiosidad de los calabizos reside en su principal materia prima, la calabaza. En su gran mayoría este vegetal está formando por agua, por ello, cuando los calabizos son embutidos tienen una forma muy parecida al chorizo tradicional pero tras el secado estos adoptan una forma diferente. Esto se debe a la composición de la calabaza y, por este motivo, se necesitan 5 kilos de calabaza para la elaboración de 1 kilo de calabizos.
Todo el proceso del calabizo es un proceso artesanal realizado con mucho esfuerzo y dedicación. Desde la recogida de las calabazas, las cuales provienen de productores locales, pasando por el proceso de elaboración hasta llegar a la última etapa del etiquetado.
Tradición y creatividad
El Mercado de la Cosecha busca iniciativas como Calabizo que demuestran una vez más la existencia de un futuro en el rural. Un proyecto innovador que ha cambiado la forma de concebir el chorizo tradicional.
Aunque no sea el primer chorizo vegetal que existe, es el primero en parecerse mucho a un chorizo. Después de investigar y valorar las posibilidades que había dentro del mundo de la alimentación han apostado por reinventar una receta ancestral gallega. Han retirado los ingredientes de origen animal que contenía este embutido y los han sustituido por ingredientes vegetales.