Hace unas semanas comencé con mucha ilusión los ensayos en la finca experimental de la Fundación Galicia Sustentable. Una de las pruebas diseñadas fue el establecimiento y crecimiento de diferentes especies en las parcelas de las fincas objeto de estudio, bajo eucaliptal, para así poder comparar los distintos resultados atendiendo a diferentes variables: encalado y no encalado, aplicación de acolchados o no, siembra directa frente a trasplante de plántulas enraizadas, etc. Y hoy os quiero contar un poco más acerca de nuestros ensayos sobre la siembra directa.

Fitotoxicidad del eucalipto

Una de las cuestiones que a priori nos preocupaba era la posible fitotoxicidad de los suelos de eucaliptal sobre la germinación y crecimiento de plántulas hortícolas y pratenses; ya que es bien conocido el efecto alelopático de esta especie.

A modo de recuerdo, las plantas con propiedades alelopáticas liberan o exudan a través de sus raíces, hojas, flores, fragancias y esencias compuestos aleloquímicos; y estos pueden tener efectos atrayentes, repelentes, inhibidores o estimulantes sobre otras plantas, insectos o microorganismos como hongos o bacterias.

La ola de frío también afecta

Por otra parte, todos hemos sido conscientes de la intensa ola de frío que ha azotado las últimas semanas no sólo Galicia, sino toda España; y ciertamente que por lo tanto, las condiciones de temperatura no han sido las idóneas para la germinación de las semillas testadas en campo: mezclas de semillas de gramíneas y leguminosas pratenses, guisante y nabo de Lugo.

Pruebas de laboratorio

Así que siendo conocedores de esta limitación, hemos decidido hacer una prueba de germinación en condiciones controladas de temperatura en fitotrón en laboratorio, usando como medio de germinación los dos suelos de eucaliptal a testar (Eucaliptos 1 y Eucaliptos 2) y comparando este a su vez con un substrato de germinación de características estándares.

Como podéis ver en la fotografía, el procedimiento es muy sencillo. Se coloca el suelo o substrato en las Placas de Petri cuadradas, y en la parte superior se colocan las semillas. En este caso hemos optado por colocar 10 semillas de cada grupo de especies a testar a excepción del guisante, que hemos colocado solamente 6 debido a su mayor tamaño.  Una vez colocadas las semillas se mojan ligeramente con agua destilada y se meten en un fitotrón  durante 48 horas a 25° C de temperatura. Finalizado este tiempo se sacan las placas y se contabilizan las semillas germinadas con respecto al total, además de medir con un calibre la longitud de todas las radículas.

Resultados obtenidos

Los datos obtenidos son muy interesantes.

Por un lado, podemos ver en el gráfico 1 como para el conjunto de especies testadas, el porcentaje de germinación es claramente menor en  el medio de cultivo que corresponde al suelo de la parcela Eucaliptos 2; un porcentaje de germinación de entorno al 82% frente al 95% de Eucaliptos 1 y del Substrato Estándar.

Por otro lado el gráfico 2 nos muestra la longitud radicular media para el conjunto de especies por tipo de medio de cultivo. En el podemos ver que el Substrato Estándar arroja de media, una longitud de radícula de más de 2 cm que el medio de cultivo consistente en el suelo de la parcela de Eucaliptos 1; y casi 1,8 cm más con respecto al de la parcela de Eucaliptos 2. Es decir, que a las semillas que nacen en condiciones controladas en el suelo de Eucaliptos 2 les cuesta un poco más germinar, pero sin embargo, alcanzan crecimientos mayores una vez que vencen esa primera dificultad.

Lo que está claro, es que los efectos fitotóxicos de los suelos de eucaliptal parecen ser muy leves y que, los resultados de campo deberían de ser muy parecidos a los obtenidos en condiciones de temperatura controlada. De no ser esto último así, podremos entonces empezar a pensar que la fecha de establecimiento de los ensayos influyó negativamente en los resultados debido a las condiciones meteorológicas adversas que se presentaron los días inmediatamente después a la siembra.