Nuestra Agenda Rural 2030

Conseguir prosperidad en el medio rural a través de la producción de alimentos y las economías no agrícolas favorecen el desarrollo económico que provea de ingresos y cree puestos de trabajo.

Los modelos de gestión sostenibles de las explotaciones, así como el abastecimiento de alimentos de proximidad favorece la seguridad alimentaria de las comunidades.

El medio rural tiene un efecto notable sobre la salud y el bienestar a través de los productos alimentarios y los servicios ecosistémicos de los que nos provee.

La formación y la capacitación es fundamental para favorecer la profesionalización necesaria para la transformación del medio rural.

El papel de la mujer es muy importante en el medio rural. Sin embargo sigue siendo necesario impulsar la implicación de la mujer en todos los aspectos de la sociedad.

Aumentar la producción de alimentos usando menos agua es uno de los grandes desafíos globales. Además, la calidad del agua es fundamental para la seguridad alimentaria.

Es necesario reducir la dependencia de combustibles fósiles de los sistemas alimentarios y agrícolas a través de una menor intensidad energética en la producción y la sustitución por fuentes de energías renovables.

La prosperidad del medio rural requiere diversificar la oferta en el rural a través de nuevos modelos de negocio que demanden trabajos cualificados y diversos.

Un acceso asequible a las tecnologías y favorecer la conexión con los mercados son esenciales para estimular la economía en el medio rural.

Debemos trabajar por reducir las desigualdades y las grandes disparidades en el acceso a los recursos y las oportunidades entre el medio urbano y el medio rural.

Entendiendo que para la sostenibilidad es necesario considerar de manera interrelacionada los asentamientos rurales y urbanos, es necesario construir vínculos entre ellos y abordar los problemas asociados a la propiedad y uso de la tierra.

Para atender las crecientes necesidades de agua, energía, alimentos y otros productos es necesario cambiar a enfoques de producción y consumo hacia otras que resulten sostenibles.

El medio rural es uno de los grandes sufridores de las consecuencias del cambio climático pero en un escenario de prosperidad sostenible debe convertirse en parte de la solución a través de escenarios sintrópicos con más resiliencia que reviertan en parte los efectos del cambio climático.

Los modelos de negocio y de gestión sostenible con los que trabajamos en el Mercado de la Cosecha pueden servir de inspiración a comunidades costeras para el aprovechamiento sostenible de sus recursos marinos.

Es necesario implementar modelos de gestión con enfoques sostenibles para la gestión de los recursos naturales y los ecosistemas. El medio rural tiene un papel fundamental por su contacto con los mismos.

La seguridad alimentaria y un sector agrícola saludablepueden desempeñar una función fundamental en la prevención de conflictos y la migración forzada.

A través de la divulgación y la transferencia de conocimiento tratamos de favorecer que todos los actores involucrados participen desde su posición en la implementación de una agenda tan compleja e interrelacionada como es la de los ODS.